10 de junio de 2016

La excursión a oriente - El ferrocarril de Antonio Roig

En 1904 Antonio Roig Torrellas, dueño de la Central El Ejemplo en Humacao, se unió a Julio Gay del Santo y la familia Davidson de Nueva York para fundar la Central Juncos y adquirir alrededor de 1,500 acres de fincas circundantes. Alrededor del 1916 se conectaron las dos centrales con una nueva línea ferroviaria de 30 pulgadas de ancho que partía de la Central El Ejemplo a lo largo de la cuenca del Río Humacao en dirección a Las Piedras en donde cambiaba de rumbo hacia el oeste en dirección a Juncos. Esta antigua vía ferrea desapareció del paisaje hace muchas décadas pero a través del siguiente articulo de un periódico de la época podemos transportarnos al momento inaugural de esta interesante línea ferroviaria del este de Puerto Rico.

Familia Roig e invitados en la línea de Humacao a Juncos ca.1915.1


La excursión a Oriente2


La cumplida invitación de que fuimos objeto por parte de los excelentes amigos Pierre Giusti y Edurado González, a fin de que asistiéramos el domingo a la inauguración del empalme de las vías férreas de nuestro siempre amigo Sr. Antonio Roig con los de la Central Juncos, nos proporcionó un día inolvidable, grato y magnífico.

En Marcha

A las 8 a.m. en el automóvil del querido amigo Julio Palacios y en su compañía, salimos de San Juan, uniéndonos en la carretera de Santurce, con otros que conducían familias y periodistas en representación de nuestros principales diarios. Como en alegre romería rodaban los autos, por la extensa carretera que media entre esta ciudad, y la ciudad del “Turabo”.

El ferrocarril de la Central Juncos

En la estación de “Rincón” nos esperaba el ferrocarril de la Central “Juncos”, donde nos detuvimos media hora en espera de automóviles que llegaron con algún retraso, partiendo el tren con los excursionistas inmediatamente después. En la mencionada estación el simpático joven Agripino Roig (hijo de D. Antonio) y su bella y gentil Sra. Angelina Openhaimer recibieron a los viajeros.

En marcha el tren

Presidieron la excursión el Sr. Antonio Roig y su Sra. Al entrar en sus dominios, reunidos los excursionistas y en marcha el tren, la conversación se hizo muy animada entre los viajeros, dando nota de belleza las Sras. De Roig, Giusti, Geigel, Bustelo, Varela, de Bagó, de Toro, Srtas. Giusti, Geigel y Cestero.

Dos minutos en la estación de Gurabo

En la estación de Gurabo se incorporaron a nosotros el Dr. Barreras, su Srta. Hija, distinguidas personas y bellas señoritas. Las últimas casas de este lindo pueblo están casi a la margen de su poético río. En la estación de Humacao tomaron el tren otros viajeros y la orquesta, que a los ecos de la Borinquen nos saludó al llegar.

Atrevida obra de ingeniería

La vía férrea de la Central “Juncos” construida bajo la dirección del Sr.  Bonocio Llenza, es una de las obras más sorprendentes que se han llevado a efecto en el país. En la falda de la cordillera de la vía, la montaña rocosa, y a la izquierda pavorosos abismos, de profundidad insondable, corre el tren una trayectoria extensa que sorprendió hondamente a los viajeros, sobrecogidos todos, ante el arrojo y la valentía del director de esa vía magna, que tanto acredita a su ingeniero constructor Sr. Llenza. El Sr. Antonio Roig, ha engrandecido su país con esa obra de su propio peculio, sin auxilio extraño y atenido a su propio esfuerzo de luchador. Su hijo Agripino lo ha secundado; él fue inspirador del proyecto, y a ambos debe la región oriental de la Isla, esa empresa portentosa, que los enaltece facilitando el transporte de frutos en las zonas de Juncos, Gurabo, Piedras y Humacao; una de las comarcas más productoras con que cuenta Puerto Rico en su límite oriental.

El Central “Juncos” a la vista y el Central Ejemplo después

A las 10:30 llegamos al Central “Juncos”, y poco después al “Ejemplo”, de Antonio Roig; las dos odalistas de la extensa y fértil llanura de Humacao.

El gran puente “Audaz”

Pasados los puentes “Agripino”, “Adalberto” y “Guabanal” llegamos al que bien merecido tiene el nombre de “Audaz”. La construcción de este puente se empezó el día 1º de abril y se terminó el día 16 de junio, y como durante este término hubo 11 domingos y 5 días de Injunction, el trabajo se ha hecho en 61 días laborables. La longitud es de 240 pies y el puente está sostenido por 7 columnas a 71 pies de altura del sitio más bajo, teniendo dichas columnas una cimeniación de 13 pies de profundidad, sobre fondo de roca. Las columnas pesan 500,000 libras cada una.


"Inauguración del hermoso puente 'Audaz' y de la ínea férrea propiedad de don Antonio Roig, en Juncos. Abajo un grupo de concurrentes a la fiesta".3



Se usó para la construcción:

400 metros cúbicos de arena,
1,237 metros cúbicos de piedra triturada
2,164 barriles de cemento
16,629 pies de madera
70,000 libras de varillas de acero.
14 vigas de hierro
140 traviesas y 2 5/8 toneladas de rieles.

El costo de estos materiales ascendió a $11,620.20. Se pagó por jornales $5,179.00. Y se pagó por el pase $7,000.00. En junto $23,799.00. Los $7,000.00 de gastos del pase representan 41.66% del valor de los materiales y los jornales, y representa el 135.15% del valor de los jornales solamente.

Sobre el abismo

Indudablemente que fue un momento de angustia para los viajeros la parada del tren a la mitad del puente y sobre el abismo, pero era necesario que el Sr. Escalona tomara una vista del tren en el puente; y que ala garantizar su resistencia probaran los viajeros su serenidad.

El bautizo

En tierra los viajeros, la bella y elegante esposa del Sr. Roig, Sra. Eulogia Guzmán, vertió una botella de champagne sobre el puente; bautismo pagano alumbrado por el sol del medio día. Eran las 12. Los viajeros tomamos nuevamente el tren y a los acordes de la Borinquen hizo marcha el ferrocarril cruzando entre cañaverales frondosas las grandes llanuras humacaeñas.

Un prado de mariposas y una alameda de bambúes

Llamó nuestra atención la vista de un prado lleno de blancas mariposas que por millares revoloteaban como a un metro del gramal y a no poca distancia del tren, y una bellísima alameda de bambúes que contemplamos largo rato al correr el ferrocarril. Ilusión para nuestras almas y frescura para nuestras frentes, después de la impresión que nos produjo el “Audaz”.

Alto el tren

En la risueña playa de Humacao y frente a un parque caprichoso y bello que se oculta entre un palmar, hizo alto el tren.

El Banquete

Al descender del ferrocarril entramos a una especie de kiosco rústico, donde en cinco largas mesas, había cientoveinticinco cubiertos dispuestos para otros tantos comensales, tomando cada cual, su puesto respectivo. Ricos manjares, abundantes licores y exquisitos dulces, fueren servidos a los viajeros. El popular y estimado amigo Ciro Malatrazzi estaba allí, demostrando saber cumplir lo que a él se encarga. Frente al mar, con una brisa deliciosa dominando la vista de la cercana isla de Vieques, se hacían los honores perfectamente a tan ricos apetitos. Casi todo el pueblo de Humacao, rodeaba el parque; gente sencilla que gozaba con lo que un hijo de su tierra había hecho por ella y que con sus amigos festejaba. En todas las manos el mapa del extremo este de la Isla, indicándonos los terrenos que posee la Central “Juncos”, la zona que controla y las líneas férreas que le sirven. Como recuerdo de la inauguración del empalme de las vías férreas de D. Antonio Roig con las del Central “Juncos”. En aquella hora, de mesa agradablisima, el champagne dio el anuncio a los brindis y para los Sres. De Roig se levantaron todas las palmadas, que resonaron al hablar el Dr. Fernández Juncos, el Lcdo. Cuevas Zequeira, y el Sr. Eduardo González. El Sr. M. Domenech, Comisionado del Departamento del Interior, Sres. Alcaide Cortada, Subirana, Toro, Bustelo, Geigel, Durán, Giusti, Llenza, Silva, Paso, Julio Santiago, Nido, Rexach, Laguna, Benedicto, F. Fernández, Palacios y Cestero eran concurrentes. La prensa, muy bien representada por los señores y amigos Dalmau Canet, Rodríguez Vera, Hipólito Dávila, de Diego, F. Santiago y A. Puig. El “Puerto Rico Ilustrado” tomó su impresión gráfica.

Terminados el banquete y los brindis, se improvisó un baile criollo en el kiosko del parque, paraje conocido por “Punta Santiago”. Y todo el mundo bailó allí; centralistas, financieros, periodistas y una juventud alegre y decidora; al arrullo del palmar, al batir de las olas besan aquellas playas, y al fresco acariciador de aquellas auras marinas.

A los automóviles

“A los automóviles”, dijo una voz amiga, y todos fueron al que les correspondía, partiendo de las playas de Humacao a las 4 de la tarde y llegando a San Juan a las 6 y media. ¡Día hermoso el del domingo! Agradecemos a los Sres. Giusti y González la satisfacción que nos han proporcionado disfrutando el domingo de un día espléndido, lleno de alegrías, de expansiones y de regocijo espiritual. Que el Central “Juncos” obtenga los más altos beneficios con su nueva empresa ferrocarrilera y vaya nuestro aplauso al Sr. Antonio Roig, benefactor generoso de la hermosa, rica y fértil región de Oriente.

Migdalia


Construcción de la línea ferroviaria de Humacao a Juncos ca1915.1
Foto rotulada "Ferrocarril de Antonio Roig". Fecha desconocida.1


Agradecimiento


Agradecemos al amigo Dave Deyo por suministrarnos el articulo de la publicación El Tiempo y a Elías C. Quintana Matías por suministrarnos la foto del puente Audaz.

Fuentes


1. Deyo, Dave. (2016, octubre 6). Fotos de la familia Roig. [Comunicación personal].

2. Migdalia. (1916, junio 27). Excurción a Oriente. [Periódico digitalizado]. El tiempo p. 3.

3. Portada. [Revista digitalizada]. Puerto Rico Ilustrado. vol. 331.